Enfermedad periodontal: Guía completa para entenderla y combatirla

Periodoncia

Ver sangre en el lavabo después de cepillarte no es normal. Aunque muchos lo ignoren, es la primera señal de alarma que tus encías te envían. Esta señal puede ser el inicio de la enfermedad periodontal, un enemigo silencioso que, si no se trata, puede tener consecuencias serias para tu boca y comprometer la estabilidad de tus dientes.

La buena noticia es que no estás indefenso. Entender qué es la enfermedad periodontal, reconocer sus síntomas a tiempo y conocer los tratamientos disponibles te da el poder de actuar antes de que sea demasiado tarde. En este artículo encontrarás toda la información que necesitas para proteger tu sonrisa y recuperar la salud de tus encías.

¿Qué es exactamente la enfermedad periodontal? de la gingivitis a la periodontitis

La enfermedad periodontal es una infección bacteriana que afecta a los tejidos que rodean y sostienen tus dientes: las encías, el ligamento periodontal y el hueso alveolar. Esta condición no aparece de la noche a la mañana, sino que evoluciona en dos fases progresivas que es fundamental conocer.

La primera advertencia: la gingivitis

La gingivitis es la fase inicial de la enfermedad periodontal y, afortunadamente, es 100% reversible si se trata a tiempo. Se produce cuando la placa bacteriana —esa película pegajosa e invisible llena de bacterias— se acumula en la línea de la encía debido a una higiene bucal insuficiente.

Los síntomas característicos de la gingivitis incluyen:

  • Encías rojas e inflamadas (en lugar del color rosa pálido saludable)
  • Sangrado al cepillarte o al usar el hilo dental
  • Encías sensibles al tacto
  • Mal aliento ocasional

Lo más importante que debes saber es que en esta etapa no hay daño irreversible. Con una limpieza profesional y mejorando tu rutina de higiene bucal, puedes revertir completamente la gingivitis y devolver tus encías a un estado de salud óptimo.

El punto de no retorno: la periodontitis

Cuando la gingivitis no se trata, la infección avanza más allá de la encía superficial y se convierte en periodontitis, también conocida popularmente como piorrea. Esta es la fase seria de la enfermedad periodontal porque ya no solo afecta al tejido blando, sino que empieza a destruir el hueso que sostiene tus dientes.

En esta etapa, las bacterias penetran bajo la línea de la encía formando lo que llamamos «bolsas periodontales» —espacios profundos entre el diente y la encía donde se acumulan más bacterias y sarro—. A medida que la infección progresa, el hueso se va perdiendo gradualmente, los dientes comienzan a perder su soporte natural y, en los casos más avanzados, pueden llegar a aflojarse e incluso caerse.

La periodontitis es irreversible en cuanto al daño óseo ya producido, pero sí se puede detener su avance con el tratamiento adecuado. Por eso la detección temprana es absolutamente crucial.

¿Estás en riesgo? los síntomas de la enfermedad periodontal que no puedes ignorar

Tu cuerpo te habla constantemente. Cuando se trata de la enfermedad periodontal, tus encías te envían señales claras que nunca debes pasar por alto. Si experimentas uno o varios de estos síntomas, es momento de actuar:

  • Sangrado de encías: incluso durante el cepillado suave o de forma espontánea. Este es el síntoma más común y el que más personas minimizan erróneamente.
  • Mal aliento persistente (halitosis): que no desaparece después del cepillado ni con enjuagues. Es causado por las bacterias que se multiplican en las bolsas periodontales.
  • Encías de color rojo intenso o morado: en lugar del rosa saludable. La inflamación crónica cambia su apariencia.
  • Encías retraídas: tus dientes parecen más largos de lo normal porque la encía ha perdido altura y se ha separado del diente, exponiendo parte de la raíz.
  • Hipersensibilidad dental: molestias o dolor agudo al consumir alimentos fríos, calientes o dulces, causado por la exposición de las raíces dentales.
  • Dolor al masticar: incomodidad o dolor al morder, especialmente con alimentos duros.
  • Movilidad dental: notar que tus dientes se mueven o cambian ligeramente de posición. Este es un síntoma de fase avanzada que indica pérdida significativa de hueso.
  • Pus entre los dientes y las encías: señal de infección activa que requiere atención inmediata.
  • Espacios nuevos entre los dientes: que antes no existían, provocados por la pérdida de soporte óseo.

Si has identificado alguno de estos signos, no esperes a que empeore. La enfermedad periodontal es progresiva y el tiempo juega en tu contra.

El plan de acción en Rochas Dental: diagnóstico y tratamiento de la enfermedad periodontal

Enfrentar la enfermedad periodontal no tiene por qué ser aterrador. Con el diagnóstico correcto y un plan de tratamiento personalizado, puedes detener el avance de la enfermedad y recuperar la salud de tus encías. En Rochas Dental seguimos un protocolo científico y humano que ha demostrado su eficacia en miles de pacientes.

El diagnóstico preciso: estudio periodontal completo

El primer paso es siempre conocer el estado real de tus encías y del hueso que sostiene tus dientes. Nuestro estudio periodontal completo incluye:

Sondaje periodontal: utilizamos una sonda milimetrada para medir con precisión la profundidad de las bolsas periodontales alrededor de cada diente. En encías sanas, esta profundidad no supera los 3 milímetros. Profundidades de 4 mm o más indican la presencia de periodontitis.

Radiografías dentales: nos permiten visualizar la pérdida de hueso que no es visible a simple vista. Esta información es crucial para determinar el grado de avance de la enfermedad y planificar el tratamiento más adecuado.

Evaluación del sangrado y la inflamación: registramos todos los puntos donde hay sangrado y el nivel de inflamación de la encía.

Este diagnóstico detallado nos permite clasificar tu caso, explicarte exactamente qué está pasando en tu boca y diseñar un plan de tratamiento personalizado.

Fase 1 del tratamiento: el curetaje o raspado y alisado radicular

El curetaje dental, también llamado raspado y alisado radicular, es el tratamiento fundamental para la periodontitis y constituye la primera fase terapéutica.

¿En qué consiste exactamente? Es una limpieza profunda que va más allá de la línea de la encía, donde se acumulan el sarro y las bacterias responsables de la infección. Con instrumentos especializados (curetas y ultrasonidos), nuestros periodoncistas eliminan meticulosamente:

  • El sarro (placa calcificada) que se ha adherido a la raíz del diente bajo la encía
  • Las bacterias y toxinas acumuladas en las bolsas periodontales
  • El tejido enfermo que impide la cicatrización

Además, alisamos la superficie de la raíz para dificultar que las bacterias vuelvan a adherirse y facilitar que la encía se reinserte al diente de forma natural.

¿Es doloroso? Esta es la pregunta que más preocupa a nuestros pacientes. La respuesta es no. El procedimiento se realiza bajo anestesia local, por lo que no sentirás dolor durante el tratamiento. Después, es normal experimentar una ligera sensibilidad que desaparece en pocos días y se puede controlar fácilmente con analgésicos suaves si es necesario.

El curetaje se suele realizar por cuadrantes (dividiendo la boca en cuatro secciones) en sesiones separadas, para tu mayor comodidad.

Tratamientos avanzados para casos complejos

En Rochas Dental estamos preparados para manejar todos los niveles de severidad de la enfermedad periodontal. Para casos más avanzados donde el curetaje no es suficiente, disponemos de tratamientos complementarios:

Cirugía periodontal: en situaciones donde las bolsas son muy profundas o persisten tras el tratamiento inicial, podemos acceder quirúrgicamente a las raíces para una limpieza más exhaustiva y remodelar el hueso afectado.

Injertos de encía: cuando la retracción gingival ha expuesto demasiado la raíz del diente, podemos realizar injertos para cubrir esas áreas, reducir la sensibilidad y mejorar la estética de tu sonrisa.

Regeneración ósea guiada: técnicas avanzadas para intentar recuperar parte del hueso perdido en casos seleccionados.

Nuestro equipo de periodoncistas evaluará tu caso específico y te recomendará el tratamiento más adecuado para tus necesidades particulares.

Mantenimiento periodontal: tu compromiso con el éxito a largo plazo

Una vez controlada la infección, entramos en la fase más importante para garantizar que no vuelva a aparecer: el mantenimiento periodontal. Consiste en limpiezas profesionales más frecuentes que las habituales (generalmente cada 3-4 meses en lugar de cada 6-12 meses), adaptadas a tu nivel de riesgo individual.

En estas visitas, eliminamos la placa y el sarro antes de que puedan causar problemas de nuevo, y monitorizamos continuamente la salud de tus encías. Considera estas citas como tu seguro de vida para tus dientes: una pequeña inversión de tiempo que protege todo el trabajo realizado y tu inversión en salud bucal.

La prevención: el mejor tratamiento para mantener tus encías sanas de por vida

Como en casi todo lo relacionado con la salud, prevenir la enfermedad periodontal es infinitamente más fácil, cómodo y económico que tratarla. Estas son las claves que debes incorporar a tu rutina diaria:

Cepillado eficaz: cepíllate los dientes al menos dos veces al día durante dos minutos, utilizando una técnica correcta que limpie también la línea de la encía. Usa un cepillo de cerdas suaves y considera un cepillo eléctrico, que facilita una limpieza más completa.

Limpieza interdental diaria: el cepillo solo alcanza el 60% de las superficies dentales. El 40% restante está entre los dientes, donde se acumula la placa bacteriana. Usa hilo dental, cepillos interdentales o un irrigador bucal cada día sin falta. Esta práctica es probablemente la más importante para prevenir la enfermedad periodontal.

Enjuague bucal: complementa (pero no sustituye) el cepillado y la limpieza interdental. Elige uno con acción antibacteriana si tu dentista te lo recomienda.

No fumes: el tabaco es uno de los factores de riesgo más importantes para desarrollar periodontitis y además dificulta enormemente su tratamiento y cicatrización. Si fumas, tus probabilidades de desarrollar enfermedad periodontal se multiplican por 5.

Controla el estrés y la alimentación: el estrés crónico debilita tu sistema inmunitario, y una dieta deficiente en nutrientes esenciales (especialmente vitamina C y calcio) puede afectar la salud de tus encías.

Visitas regulares al dentista: acude a tu clínica dental cada 6 meses (o con la frecuencia que te recomienden) para limpiezas profesionales y revisiones. La detección precoz de la gingivitis permite revertirla antes de que evolucione a periodontitis.

Preguntas frecuentes sobre la enfermedad periodontal

¿La enfermedad periodontal duele?

En sus etapas iniciales, la gingivitis y la periodontitis leve no suelen causar dolor, lo cual es precisamente lo que las hace tan peligrosas. La ausencia de dolor lleva a muchas personas a ignorar los síntomas como el sangrado o la inflamación. Sin embargo, en fases más avanzadas puede aparecer molestia al masticar, sensibilidad o incluso abscesos dolorosos. No esperes a sentir dolor para acudir al periodoncista.

¿Es contagiosa la enfermedad periodontal?

Aunque las bacterias que causan la enfermedad periodontal pueden transmitirse a través de la saliva (al compartir utensilios o con besos), esto no significa automáticamente que la otra persona desarrollará la enfermedad. Para que se produzca, deben darse otros factores como mala higiene bucal, predisposición genética o factores de riesgo como el tabaquismo. No obstante, si tienes periodontitis activa, es recomendable no compartir cepillos de dientes ni utensilios.

Si tengo gingivitis, ¿significa que tendré periodontitis?

No necesariamente. La gingivitis es completamente reversible si se trata a tiempo con una limpieza profesional y mejorando tu higiene bucal en casa. Solo evoluciona a periodontitis si se permite que la infección progrese sin tratamiento. Este es precisamente el mensaje más importante: si actúas a tiempo, puedes evitar el daño irreversible.

Una vez que pierdo hueso por la periodontitis, ¿se puede recuperar?

Esta es una de las preguntas más dolorosas. En la mayoría de los casos, la pérdida de hueso causada por la periodontitis es permanente. Sin embargo, con el tratamiento adecuado podemos detener completamente el avance de la enfermedad y estabilizar la situación, preservando el hueso que aún conservas. En algunos casos seleccionados, existen técnicas de regeneración ósea que pueden recuperar parte del hueso perdido, aunque esto no siempre es posible o predecible. Lo crucial es actuar cuanto antes para minimizar las pérdidas.

¿El tratamiento de curetaje es doloroso?

No. El curetaje dental se realiza bajo anestesia local, igual que cualquier empaste, por lo que durante el procedimiento no sentirás dolor. Después del tratamiento, es completamente normal experimentar una ligera sensibilidad en las encías durante 2-3 días, que se controla fácilmente con analgésicos comunes. La mayoría de nuestros pacientes nos comentan que el procedimiento fue mucho más llevadero de lo que habían imaginado. El miedo anticipado es siempre peor que la realidad del tratamiento.

¿Cuánto tiempo se tarda en curar la enfermedad periodontal?

Depende de la severidad de tu caso. La gingivitis puede resolverse en cuestión de semanas con una limpieza profesional y mejorando la higiene en casa. La periodontitis requiere un proceso más largo: el curetaje inicial suele realizarse en 2-4 sesiones, y después necesitarás unas 6-8 semanas para que las encías cicatricen y evaluar los resultados. Sin embargo, es importante entender que la periodontitis es una condición crónica que requiere mantenimiento de por vida. Con el tratamiento adecuado y el compromiso con el mantenimiento, tus encías pueden estar estables y saludables durante décadas.

Tus encías tienen memoria: actúa hoy

La enfermedad periodontal es tratable, especialmente en sus fases iniciales. Ignorar el sangrado de encías o la inflamación es dejarle la puerta abierta a problemas mucho más serios: pérdida de hueso, movilidad dental y, en última instancia, la pérdida de piezas dentales que podrían haberse salvado.

La buena noticia es que tienes el poder de detenerla. Cada día que pasa sin actuar, la enfermedad avanza silenciosamente. Pero cada día que decides tomar acción, estás invirtiendo en tu salud, en tu sonrisa y en tu calidad de vida futura.

No estás solo en este proceso. En Rochas Dental, nuestro equipo de periodoncistas especializados te acompañará en cada paso del camino, desde el diagnóstico hasta la recuperación completa y el mantenimiento a largo plazo. Hemos ayudado a miles de pacientes a recuperar encías sanas y sonrisas seguras.

Tus encías te están pidiendo ayuda. Solicita tu estudio periodontal completo en Rochas Dental y da el primer paso definitivo para proteger tu salud y tu sonrisa. No dejes para mañana lo que puede salvarte hoy.


Rochas Dental – Tu clínica dental de confianza en Sant Cugat del Vallès para cuidar de tu salud periodontal. Visítanos y descubre cómo podemos devolver la salud a tus encías.